martes, 28 de enero de 2014

EL TAPÓN DE ANDREIS COMO FACTOR DE RIESGO

CONDICIÓN GEOLÓGICA DEL TRAMO FINAL DEL RÍO MAGDALENA


1. PREÁMBULO

Los poetas siempre miran más allá de lo que pueden hacer normalmente cualquier provinciano de compostura formal. Rafael Campo Miranda, insigne poeta y compositor soledeño lo expresó en toda su ineludible excelencia:

"Río y Mar, Tierra de mi corazón, tierra que me vió crecer, y ahora yo le canto esta linda canción... Barranquilla linda, Barranquilla mía, no tengo más que ofrecerte, esta linda melodía"

Ni decir de Pacho Galán quien con varita mágica engalanó con un merecumbé enjundioso el verso esquisito de Miranda... No hay nada que hacer: son los Soledeños quienes han endilgado con sus urdiembres de son y palabras a la periferia de las barrancas de San Nicolás más que nosotros mismos. 


2. GENERALIDADES
En días recientes han salido a la palestra pública, varias opiniones y conjeturas con relación a la profundización del canal navegable, que sirve a los diferentes terminales y muelles ubicados en la zona portuaria de Barranquilla. Sin duda un tema álgido y acucioso es la condición geológica, que sin dejar de ser menos importante, ha tenido poca divulgación de la información relacionada. Veremos que la expresión geomorfológica y las características geológicas asociadas al río, son factores decisivos para la toma de decisiones respecto a los dragados a ejecutar y a las otras obras pertinentes para domesticar al rio y consolidar la vocación portuaria de la ciudad.

Las primeras evidencias del conocimiento de la geología del tramo final del sector en cuestión son relativamente recientes, y los más detallados apenas datan desde la construcción del puente sobre el río Magdalena, a comienzos de la década del setenta. Las perforaciones mostraron la continuidad de una capa calcárea algo homogénea pero claro, al no hacer las correlaciones de la información recolectada, como tampoco las siguientes interpretaciones geomorfológicas del caso, el concepto del entorno de su estructura interna quedó inconcluso y disoluto.

Sabemos que Karakalí era la denominación en la lengua Mokaná del tramo final de lo que conocemos hasta hoy como el río Magdalena. Quizá los pobladores de Caracolí en el Atlántico no se han percatado aun que son depositarios de una denominación supremamente honrosa y estival, de ese brazo portentoso y lleno de magia que se torna en raudales crujientes cuando va en busca del mar Caribe


3. ENTORNO GEOLÓGICO

De antemano sabíamos que Barranquilla estaba emplazada en unas lomas de calizas riquísimas y duras en toda su expresión. Todas las cuadras de los barrios El Prado, Paraíso, Riomar y otros cercanos a las licencias mineras de la otrora Cementos Caribe, mostraban las mismas peculiaridades. Un flanco de calizas tremendas, exuberantes, llenas de historias y vestigios de un pasado geológico riquísimo en vida marina, eventos catastróficos y choque de placas tectónicas. Esas calizas mostraban una incidencia hacia el río... presentaban una tendencia a comprometerse con el Karakalí en un abrazo matrimonial indivisible, pero sólo las perforaciones del puente mostraban para la época, que aquello no era más que un mero encuentro casual. El focalismo como siempre, nunca nos permite mirar hacia los lados y sólo bastó encontrar el subsuelo sostenedor de la estructura.

En mi participación en el estudio del dique direccional con el laboratorio de ensayos hidráulicos de Las Flores, haciendo otras perforaciones, nos percatamos que la caliza se hacía presente de nuevo. Algo muy interesante, pero que va !!, la localía atestiguaba que eran remanentes aislados. Aunque se sabía algo de lo del puente, era cierto que esa ambientación peculiar de toda la expresión del manto calcáreo hacía notar unas dudas justas en toda la circunvalación descrita, cuando el río busca al mar.

Con el tiempo y quizá como resultado de las buenas obras hidráulicas, el caudal aumentó y el río se encargó de quitarle el manto de arena a la caliza frente a la Sociedad Portuaria de Barranquilla y mientras sus directivos estudiaban como serían los trabajos para profundizar la zona de aproximación a sus muelles, ahí sí se nos dio la oportunidad, con toda la grandiosidad que muestra la fenomenología geológica, de conocer y ser testigos de una singularidad evidente y hermosa: Un tapón hidráulico. Y más en la adyacencia de su desembocadura... extremadamente interesante... Aquí nos maravillamos cuando una persona generalmente foránea nos habla de un aforismo o alguna que otra hidalguía de un descubrimiento remoto; lejano para nuestras cuentas... Pero tener esta preciosidad acá a la vuelta de la esquina y con toda esa invariable información que nos entrega? era simplemente un milagro... vaya... no éramos tan simples entonces. Esta estructura rocosa que yace por debajo del cauce del Magdalena (léase tapón hidráulico) son rarísimas y mucho más en la desembocadura de un río de esta magnitud. Denota un fenómeno singular, particular y único porque los estuarios son rellenados por la acción de los ríos por miles y millones de años y es casi inconcebible encontrar algo de este estilo.
























Somos habitantes de una ciudad enteramente coralina, con un pasado geológico reciente que lo inscribió y lo testimonió como una isla errante que fue devorada por el impetuoso Karakalí.  De todos modos no es nada sencillo si tenemos en consideración todo lo que esta clase de actividades implica dentro del saber humano. Si hemos vivido de espaldas al río durante toda nuestra existencia como ciudad, ahora con más razón no podemos echar por la borda su condición existencial. 

Decidimos homenajear a una persona que por su prestancia y solvencia fue un ser humano en toda su valía. Es más, se rotuló así mismo como un vínculo de unión entre lo que es Ciénaga y Barranquilla. Por eso... por Alfredo Rafael Correa de Andreis, decidimos colocarle ese nombre tan sonoro y tímbrico como el Pumarejo… de las huestes de nuestra tierra. Una singularidad de ese estilo merece un nombre y dado a las razones expuestas se llama así: EL TAPÓN DE ANDREIS.


4. EL RIESGO DE DRAGAR

La Sociedad Portuaria de Barranquilla y Cormagdalena han propuesto dragar el susodicho tapón de marras de una vez por todas, pero pregunto,  ¿se han hecho todos los estudios y las consideraciones de caso? Cualquier empresa que se haga valer tiene que ser previsiva y no correr riesgos innecesarios que se pueden solventar con toda la capacidad de la ingeniería colombiana. Dragar un fondo duro y extenso puede tener inherentemente muchas causales imprevisibles que pueden presentar implicaciones de diversa índole. Los escenarios pueden ser anisotrópicos y variopintos; es más, con consecuencias impredecibles que pueden rayar en un desastre ecológico, o hidrológico, o en otros factores que alteren las inversiones portuarias  en la zona.


Foto 1. Dragado de algunos puntos del Tapón de Andreis y la roca caliza. Notar la excelente calidad del material extraído. Cortesía de MAPESA SA

Antes de dragar hay que optimizar y correr un modelo geológico en primera instancia que detalle que se va a intervenir y bajo qué condiciones. Previo a cualquier actividad de dragado de un rio, se debe invariablemente determinar un modelo geo-hidráulico que estime todas las variables habidas y por haber, las cuales tienden a influenciar y predecir la tendencia de la corriente. Previo a un dragado en una zona confinada, se debe tener claro que hacer con el material dragado y donde puede ser útil su disposición final. Esto no es capricho señores... El Tapón de Andreis si se interviene, puede causar efectos erosivos tremendos en alguna de las orillas o en su defecto, tiene la posibilidad de cambiar cursos de cauces que eran hasta su momento, inveterados. No son alarmismos ni nada por el estilo; simplemente se invita a que se consideren invariablemente todas las causas y consecuencias que puede tener un dragado de este orden y sus impactos en las orillas del río como tal. Nadie se encuentra excluido y es una práctica perfectamente normal en un trabajo de ingeniería de características intervencionistas.

La historia reciente muestra que cualquier alteración antrópica de un río puede presentar más adelante consecuencias desagradables. Los rusos en el año de 1927 alteraron el Volga en su desembocadura al Caspio con un dragado intenso, cerramientos de cauces y se presentaron consecuencias catastróficas en poblaciones importantes que habitaban en su delta, las cuales posteriormente fueron trasladadas a emplazamientos más seguros. Tampoco olvidemos el suceso de la Boca del Cura, en la historia algo reciente de la actividad fluvial colombiana, cuando por hacer caso a la orientación del sacerdote José de Gavaldá para mitigar la sequía del año 1938, la población hizo la modificación del caño Caribeña y un corregimiento de Majagual (Sucre) fue arrasado por el cauce del río Cauca, persistiendo este problema hasta el día de hoy. 



Víctor Marenco Boekhoudt
Ing. Geominero MSc.  





lunes, 27 de enero de 2014

SE DERRUMBA LA IMAGEN DE LA ALCALDESA DE BARRANQUILLA

LOS PROBLEMAS DE ELSA


Para ser famoso no basta que hagas algo y te sea reconocido como una contribución. No... para nada... basta con que no hagas nada y tengas como consorte una cantidad de áulicos que hablen bien de tu persona. Tal y cual como pasa con nuestra afamada, por la fuerza, alcaldesa. El Heraldo no es mas que su pertinente áulico de vocinglerías.

Esta gráfica distribuida por el diario EL Espectador y por la firma Polimétrica, lo dicta y lo dice todo. De las cinco ciudades en este país consolidadas, cuándo le preguntan una opinión sobre su mandantario, la alcaldesa es la que sale peor librada... Véanla...












Apenas le reconocen un 36% de aceptación, resultado a todas vistas penoso y ridículo. Un contraste atozigante si se compara con lo que aparece con el mandatario de la ciudad de Bogotá con un 58% de aceptación por no decir de mas.

No vas bien Elsita y como siempre lo he dicho a los cuatro vientos, es desconcertante que siendo lo que es su persona y su condición, con todo el respeto que se merece ese estado, se desesperanza uno al saber que es la mandataria en toda la historia de la ciudad de Barranquilla que menos ha hecho por los ciudadanos que viven en condición de especial. El mobiliario urbano básico de Barranquilla no es amigable ni asequible con las personas en situación especial de movimiento. Qué pasa alcaldesa? Acaso esas personas no cuentan?

Si es asi con los de su misma condición, díganme Ustedes que se puede esperar de los otros? Lógico, para que te desplaces sólo necesitas hacerlo en tu 4x4 blanco inmaculado porque por las aceras o en sillas de ruedas jamás lo haces.

jueves, 23 de enero de 2014

FALLAMIENTO ESTRUCTURAL DE LA OBRA CIVIL EN EL BARRIO CAMPOALEGRE BARRANQUILLA


ANTECEDENTES

Desde hace más de dos años atrás las firmas Proinar y Aconstruir participaron en la ejecución de una obra civil destinada a contener el deslizamiento de las arcillas expansivas que ocurren en el sitio en cuestión. Hasta el momento las informaciones periodísticas han hablado de la inversión de más de 35 mil millones de pesos en dicha obra. Varios fueron los exponentes de esta propuesta y en realidad, su sustentación deparó muchas dudas acerca de la conveniencia o no de dicha obra. En lo que a mí respecta, siempre he sido del postulado que una rigidización no era el mecanismo ingenierilmente más adecuado para solucionar el desequilibrio antrópico creado por las obras de urbanización que estaban presentes.
Hoy conocemos de antemano que en la hilera inferior de pilotes, la que está inmediatamente adyacente a la calle 83, se han presentado implosiones de los mismos y fenómenos corrosivos de su varillaje que degradan la capacidad de sostenimiento de la estructura. En pocas palabras, la obra ha perdido su aporte sostenedor y es muy poco probable que se pueda restaurar su condición de estructura contrarestante a la presión del terreno.


EFECTOS

Las arcillas se han deslizado y al estar en una condición de apertura total, la percolación del agua dentro de las entrañas de las arcillas las tornan más movedizas y deleznables. 


Foto 1. Vista de la pésima condición estructural de los pilotes inferiores. Algunos hasta corroídos y otros totalmente implosionados por la presión del terreno.


La foto anterior es un gran documento revelador porque muestra a las claras que el vaciado y curado del concreto no garantizó que el aislamiento químico necesario. El decrecimiento del diámetro de los pilotes atestigua que el concreto no se fraguó con todas las de la ley y por tanto su solidificación fue muy pobre, dando como resultado final una, condición exigua de sostenimiento rígido. Se nota adicionalmente que estos pilotes están bajo una fuerte presión por el desplazamiento de terrenos causando un empuje ladera abajo lo cual ha originado una desunión de los mismos, con la parte inferior de la pantalla.
Con un orden estructural de estas características es muy poco probable que se entren a considerar alternativas claras de solución de la obra. Es más, a sabiendas que la misma no se encuentra finalizada aún y que por tanto, no ha sido oficialmente inaugurada. Ahora con más razón de sobra, se puede inferir que estas soluciones que tanto se han enarbolado desde muchos años atrás no sirven para la contención de estos fenómenos de migración de masas en volúmenes que superan los dos millones de metros cúbicos. Son masas descomunales y es muy poco probable que infraestructuras de este estilo puedan hacer contención debida a la mismas.
La condición actual de inestabilidad geológica y los pésimos resultados que han dado estas alternativas de solución, nos hacen pensar en que el análisis de las mismas deben ser distintas como también, sus alternativas de solución.







Foto 2. Estos encamisados no le solucionana nada a la estructura. Se llama "Empanada" y es una burla a la ingeniería colombiana.

CONCLUSIONES
Una vez más insistimos, como en otros escritos y otras declaraciones en vídeos anteriores:     
  1.  La rigidización y la contención confrontativa de las presiones del terreno que se ejercen hoy día, no son las mejores alternativas para remediar estos deslizamientos      
  2.  La MITIGACIÓN  como concepto constructivo no va a lugar. Hay que remediar y solucionar de una vez por todas estas manifestaciones gravitacionales del terreno porque con las prácticas actuales, los desplazamientos han demostrado ser indetenibles     
  3.  El ruido acaecido la semana pasada se debe a la implosión de uno de los pilote por causa de la presión lateral del terreno, al chocar con la pantalla de la obra    
  4.  Si existen otras alternativas de solución que se pueden manejar y se remiten al manejo Socio-Ambiental del área de influencia, pero de por sí  una posición de este estilo exige una nueva revaloración del concepto a solucionar.
  5. El movimiento del terreno ladera abajo va a continuar y se incrementará grandemente con la avenida de la próxima temporada invernal, llegando a impactar las aceras y las vías adyacentes.
  6. La inversión de 35 mil millones de pesos se perdió, No dio sus efectos requeridos y por tanto, esta plata perdida no podrá jamás recuperarse. Veo poco probable que se hagan efectivas las pólizas de cumplimiento y de garantías. 

Foto 3. Vean en todo el centro la fractura del muro... ya falló, hagan lo que hagan no sirve...

Creemos que ya es hora de ser sensatos y comedidos al enfrentar una serie de alternativas de evaluación del orden actual de desconocimientos de causa. Detengamos de una vez por todas la impertinencia, el caotismo opinacional y la miopía de causa en la concepción de obras que si nos entreguen soluciones y tranquilidad de las mismas.

Hasta cuándo habremos de tragar entero por un gasto que se tornó inoficioso y que no tiene parangón alguno en la ingeniería colombiana? Si creen Ustedes que después de esta clase de efectos y causas podremos sustentar que estas obras sin son prenda de garantía para el futuro? Y cuándo se rehabilitará la 38 o avenida de Los Estudiantes hasta circunvalar?

Muchas preguntas y silencios extremos de parte de los grandes medios de comunicación escrito en la ciudad de Barranquilla. 




Víctor Marenco Boekhoudt
Ing. MSc Geominería

viernes, 17 de enero de 2014

PUERTO NUEVO LA DRUMMOND EL MINAMBIENTE Y EL DRAGADO

PUERTO NUEVO LA DRUMMOND EL MINAMBIENTE Y EL DRAGADO


Si cualquier ser consciente y viviente se preocupa del orden del caos que nos circunda alrededor, puede y tiene derecho a conjeturar las situaciones anómalas. Más sin embargo, nadie tiene tres dedos de frente para no entender cómo es posible que un dragado abierto y estertóreo se lleve a cabo en la ensenada Alcatraz, entre tres ríos prístinos y valiosos: El Córdoba, El Toribio y la quebrada El Doctor. Como tampoco es concebible que las playas de las cercanías anden mugrientas y nauseabundas por culpa de los excedentes de un dragado a todas luces mal resuelto y lo peor, institucionalmente y gubernamentalmente muy  mal administrado; sin visos de controles expeditos, claros y expertos, como tampoco con tiempos de respuestas prontos.
Por tanto este profuso bien entrópico, enmarcado dentro de un quasi-orden administrativo poco elegante y diluido, queda en impactante evidencia cuando decidimos investigar que pasaba con las profusa resolútica administrativa del Minambiente colombiano respecto a las demoníacas disquisiciones drummonianas.



Para hacer el puerto de cargue directo, todo se inicia con un escrito formal de parte del susodicho ministerio consignado en la Resolución 1099 del 22 de diciembre del 2012. El propósito es modificar una licencia ambiental que se había otorgado en anteriores disposiciones en la cual la sociedad AMERICAN PORT COMPANY INC con base en una documentación anexada solicita la autorización de actividades de dragado para el canal de acceso y zona de maniobras, en conjunción con la sociedad portuaria PUERTO NUEVO S.A. Arriba se muestra la decisión sobre este respecto.
Posteriormente Drummond y Puerto Nuevo ante la grandiosidad de la tarea le explican al ministerio que ellos están en dificultad en contratar una empresa que se encargue del dragado en cuestión con las observancias debidas, exigidas dentro de los diferentes planes de manejo ambiental. Incluso, llegan a sugerir que ese tipo de dragados con aislamiento mecánico para impedir la efluencia de partículas en suspensión no existen. Drummond debe dragar alrededor de doce millones de metros cúbicos de fondo marino mientas que Puerto Nuevo, diecisiete; unas cantidades a todas luces notoriamente descomunales de acuerdo a las referencias ingenieriles colombianas.
El ministerio del Medio Ambiente mediante resolución  0168 del 20 de febrero del 2013 emana un escrito que resuelve un recurso de reposición interpuesto contra la resolución 1099 del 20 de diciembre del 2012 (catorce meses después…). El ministerio constata que si es posible aislar el efecto del corte del fondo marino por medio de una pantalla encima de la misma, como abajo se muestra:






En términos de ingeniería si hay opciones suficientes para que las labores de dragado en estas aguas tan hermosas se realicen con la observancia de las normas ambientales más exigentes. Incluso, aun a pesar que funcionarios de la Drummond le comentaron al ministerio que las labores de dragado con todas esas exigencias protectivas era un imposible de realizar, en la literatura técnica hay una profusión de alternativas que presentan que es factible adelantar el trabajo del fondo marino, minimizando el impacto negativo de la presencia de las partículas en suspensión. Todo apunta muy posiblemente al factor de la presupuestación y el costeo de las labores de dragado. Quizá por quererse ahorrar unos dineros con los cuales cuentan estas empresas, o por facilitar una contratación expedita, le insistieron al ministerio que le permitiera el dragado abierto, sin protección o pantallas algunas.  El ministerio finalmente no les acepta sus sugerencias como se muestra en el documento subsiguiente:



Pero que nos muestra nuestro orden caótico?  Pues lo que sabemos… El dragado genera unos excedentes icontrolados de partículas en suspensión, como se documentó en entregas anteriores y como todos lo conocen, su impacto negativo es apreciable en la condición biótica y ambiental en la periferia cercana a los puertos.  Por tanto dónde han estado las entidades controladoras como CORPAMAG, el MINISTERIO DEL MEDIO AMBIENTE y otras entidades como la gobernación del Magdalena y la alcaldía de Ciénaga. Hay apartes resolutivos muy elocuentes que muestran que debe haber estaciones de muestreo del agua marina con rutinas regulares para la recolección de muestras con el fin de proceder a su análisis. Hay políticas encaminadas a resguardar el componente ictiólogico y resguardar las actividades de pesca con le evaluación y la patronización de la fauna marina. Los planes relacionados con el manejo de la condición social imperante en las áreas de influencia son descritas fehacientemente dentro del articulado de estas resoluciones y por ende son de estricto cumplimiento. Se hace énfasis en la vocación turísticas de las zonas aledañas y por ende, la observancia de la condición visual e inodora de las aguas de mar de las playas son de máxima importancia.

Por tanto que ha pasado con las actividades de monitoreo y control en este ámbito? Qué ha hecho el MINISTERIO DEL MEDIO AMBIENTE con la observancia de todas estas irregularidades profusamente documentadas por medio de fotografías y videos en los medios de prensa colombianos? Porqué se insiste nada más en el cargue si de sobra sabemos que en el dragado hay elementos para colocar en cintura a estas empresas con tal que realicen las mejores prácticas ingenieriles y no contaminen el derredor con restos de un dragado inadecuado e inmundo. Salta a la palestra una gran cantidad de inquietudes que necesitan de una pronta respuestas de parte de los entes de regulación del gobierno colombiano, porque de continuar con procedimientos de este estilo, las playas de las cercanías se cubrirán de una película fina y lodosa las cuales las tornará prácticamente inviables para proyectar el turismo en las mismas, sabiendo de antemano que la vocación de esta actividad prima sobre la portuaria.

En conclusión, si Drummond y Glencore se comprometieron con sus estudios y licenciamiento a implementar labores constructivas con la observancia más estrictas de la normatividad ambiental, porqué las playas están invadidas de ese cieno marrón cobrizo que le entrega un aspecto tan indeseable? A esto agréguele el tema del bajón turístico padecido por el nefasto impacto visual que causan las playas, el bajón en la pesca artesanal comentado por los pescadores locales y la queja de los habitantes de los caseríos y barrios de la periferia. Dónde están las actividades de supervisión y monitoría de parte de las Corporaciones Ambientales y de administración del recurso marino para llamarle la atención a estas empresas?
El orden del caos continúa en conjunción con una entropía existencial que nos embarga con sus desparpajos al saber que estas orillas, con sus ambientes apacibles, llenos de luminosidad, alegría y sosiego, se verán tornados en unos pantanos espantosos y malolientes, sin opciones para que el presagio del abandono los colme y los designe más tarde, como irreparables, perdidos y destinados a algo parecido como sucedió con la Isla de Salamanca y sus manglares.


Víctor Hugo Marenco Boekhoudt

Ingeniero Geominero

miércoles, 8 de enero de 2014

EL ANGUSTIOSO CASO DEL DRAGADO DE PUERTO DRUMMOND


EL ANGUSTIOSO CASO DEL DRAGADO EN PUERTO DRUMMOND


El discurrir de los hechos relacionados con la condición ambiental en Puerto Drummond se refiere a el cargue indirecto del carbón. En pocas palabras quizá lo más grave de ese asunto sea que esta compañía no le interese cumplir la legislación colombiana, como también no sea viable que el ministerio del Medio Ambiente de Colombia, haya tenido una actitud complaciente con un operador minero que en ningún momento, ha sido disciplinado en el cumplimiento de las normas ambientales del país. Una posible prevaricación por acción por parte de este ministerio salta a la vista.

Más sin embargo haciendo una visita en este fin de semana pasado junto con los miembros de mi familia, a una casa de playa que se ubica precisamente frente al aciago muelle de esta empresa, nos percatamos de un espectáculo bochornoso: Al bajar a la playa nos percatamos que la misma ya no poseía el color verde claro de antes; ahora de forma inexplicable y casi que angustiosa nos topamos con unas aguas con color marrón cobrizo en toda la extensión de la misma. Por más de cuatro años participé en la construcción de la doble calzada que va desde Ciénaga a Santa Marta y por residir al frente de esta playa, trotar, vacacionar con mi familia y hacer ejercicios a diario en ella, logré conocerla con detalles. 



Foto 1. Vista de la playa en las inmediaciones de Puerto Drummond hace 4 años

Lo peor del caso es que al bañarme en sus aguas por cierto espacio de tiempo y luego subir a la casa mi esposa me comentó sobre del porqué estaba tan percudido... prácticamente "tiznado" de marrón. Supe de antemano que esa situación era anormal y no coincidía con las muchas vivencias que había tenido en sus aguas. Ya en el baño pude percibir que al enjuagarme, gran parte de esa coloración marrón rojiza corría por la ducha en forma de un sedimento o cieno de origen inexplicable. De dónde venía me pregunté?

La respuesta a esta pregunta reside en un hecho que no se percibe como daño o impacto ambiental hoy día por las autoridades colombianas. Nosotros si sabíamos de antemano que las turbinas de los remolcadores en el área del cargue de las barcazas, que alcanza profundidades de tres a cuatro metros, tal y cual como se observa desde las fotos satelitales de Google Earth. Sin embargo, jamás habíamos observado una coloración marrón cobriza de ese estilo. El aspecto de la playa era más que deplorable y si a eso le agregas la soledad en la que se encontraba, ya pasaba a un tono lúgubre. No habían turistas por ningún lado y eso, en épocas de fiestas de fin de año era de por si muy extraño. Qué pasaba? Obvio, ya cambiado el conserje del hotel Santorini que se encuentra en las cercanías me confirmo el hecho: "La gente no se baña porque la playa está inmunda" Ahí quede estupefacto... 


Foto 2. Aspecto del color de la playa hoy día; El dragado se realiza al fondo..

Todo muelle de cargue directo en una zona de poca profundidad necesita de la implementación logística de un canal de acceso. Esto quiere decir que ese fondo marino tiene que pasar de 3 metros a unos 16 metros en promedio por medio de un canal abierto, hecho en el fondo marino, que posibilite la entrada de barcos de cien a ciento cincuenta mil toneladas métricas. 

Creo pertinente que el ministerio del Medio Ambiente de Colombia, investigue con lujo de detalle que es lo que está sucediendo con este dragado. No me cabe la menor duda que sea precisamente una actividad de este estilo la generadora de esta situación anómala y perjudicial que impacta con severidad sobre el estado y la salubridad ambienta de las orillas de mar de la cercanía. Por tanto surgen una gran cantidad de inquietudes, las cuáles demandas de respuestas certeras. Cómo se hace el dragado? Hay o no una captación absoluta del producto del dragado por medio de una cabeza cortante ampulada? Existe una condición de aislamiento absoluto en el corte del fondo marino? Cómo se realiza el transporte del producto de la labor del dragado? Dónde y bajo que condiciones se hace el vertimiento del material dragado y sus condiciones de depositación? Se consideraron en el estudio de Impacto Ambiental la influencia de los vientos y de las corrientes marinas costeras?.Es decir, estas apenas son algunas preguntas iniciales que sopesan la dimensión de la labor de adecuación del canal de acceso al puerto o puertos de la cercanía, pero pregunto: Si realizan esas labores dentro de una condición de estabilidad socioambiental? Si se cumple un requisito esencial de no contaminar las aguas de la zona costera con partículas en suspensión?


En caso de que se sustente que estas aguas tienen esta coloración marrón cobriza, por el aporte de partículas de suspensión debido a unas labores de dragado que no están sujetas a los mínimos procedimientos ingenieriles, el ministerio del Medio Ambiente y Corpamag, debe analizar y evaluar esta situación a profundidad. Me pregunto si en algunas visitas anteriores ellos se tomaron la molestia de hacer las observaciones pertinentes en esta materia y definir si Drummond observa las mejores prácticas técnicas para realizar un dragado con bajo impacto al medio ambiente? Existen muchísima ansiedad y escozor con un condicionamiento de este estilo. Porque así como Drummond está en tela de juicio por no cumplir la normatividad ambiental colombiana al no implementar un cargue directo a barcos, podría verse abocada a una serie de sanciones más severas si se comprueba que la afectación ambiental severa de las costas del litoral periférico, se debe a una actividad de dragado incontrolada ambiental y técnicamente. Por tanto fuera de la situación del cargue, me parece que esta condición de cambio de color de las aguas costeras de las inmediaciones requiere la más atenta de las atenciones. Ya hasta los mismos pescadores se quejan de que no realizan la misma cantidad de capturas como en meses atrás... por supuesto, con un mar en ese estilo, se muere la hierba mariba, se viola el habitad de los peces y se rompe la cadena alimenticia. 



Víctor Hugo Marenco Boehoudt

Ing. MSc en Ingeniería Geominera


lunes, 6 de enero de 2014

NO HAY FALLA GEOLÓGICA ACTIVA EN BARRANQUILLA



LA INEXISTENCIA DE UNA FALLA GEOLÓGICA EN LA CIUDAD DE BARRANQUILLA



Últimamente, diversos medios periodísticos, entre esos el diario El Heraldo de la ciudad de Barranquilla, ha difundido declaraciones de personajes variopintos de la ciudad en las cuales dan a entender la existencia de una falla geológica en el sector del barrio Campo Alegre. Este es un argumento infundado, sin ninguna sustentación técnica y este escrito, tiene el propósito de aclarar que es lo que realmente ocurre desde el punto de vista científico.

En mis columnas anteriores he reseñado que la constitución geológica de la ciudad de Barranquilla es muy joven. No hay indicaciones o indicios serios que expongan o den a entender que hay huellas o trazas de algún fenómeno geológico digno de reconocer en su entorno. Se han enarbolado hipótesis diversas que tratan de plantear una serie de argumentos que explican el porqué de estos movimientos de tierra tan particulares en la periferia del barrio Campo Alegre. 



Imagen Satelital Rusa GeoSput 003 de Barranquilla y alrededores año 2011.

La mejor manera de hacerse a una idea geosísmica de un terreno en cuestión es mediante el uso de sistemas de detección remota. Esta imagen es inédita y fue obtenida mediante un intercambio personal con profesores de una prestigiosa institución de educación rusa.

Como puede observarse y desde luego, no entrando en toda una designación terminológica que puede ser complicado para un lector casual e inexperto en el tema, cualquier especialista estará en capacidad de discernir sobre la condición geológica de la ciudad de Barranquilla y sus alrededores.

Mientras al sur del departamento del Atlántico se pueden observar las trazas de una zona de fallas geológicas que colocan en evidencia la presencia de las mismas, dado a su alargamiento, dirección y homogeneidad en su expresión, la cual se indica en el archivo gráfico anexo, situación muy distinta se observa en la periferia de la orografía de la ciudad de Barranquilla y en especial, en el barrio Campo Alegre, tal como se indica. Dicho de otro modo: No hay evidencia de lineamientos estructurales severos y evidentes, como tampoco hay hundimientos desmesurados y menos, tampoco existe la presencia de áreas de fracturación severa. Es un terreno joven geológicamente y por ende, es muy poco probable que exista algún fallamiento o familias de fallas geológicas que incidan sobre el comportamiento geotectónico y el equilibro de los taludes y prominencias geográficas de Barranquilla y sus áreas circunvecinas.

Una falla geológica se caracteriza por poseer una actividad sísmica consistente y que es registrable por medio de un  sismógrafo. Este es un hecho que no es evidente en la zona en cuestión. Dicho de otra manera, las evidencias de la presencia de una falla geológica activa se le anexa a la localización de puntos de sismos o movimientos telúricos que testimonien la incidencia de la misma.

Ninguna de las condiciones anteriormente expuestas existe para concluir la existencia de una falla geológica. Las manifestaciones de movimiento de tierras en las laderas suroccidentales y noroccidentales de la ciudad de Barranquilla tienen su origen por efecto de la acción de la gravedad nada más.  Muchas veces, los comentarios sueltos y sin ninguna base científica aceleran el imaginario colectivo para sustentar opiniones de ficción con relación a la explicación de fenómenos diversos, dentro de la cultura popular.
Sostenerse en la explicación de la presencia de una supuesta falla geológica es argüir argumentos que no tienen ninguna clase de solidez  ni conceptual y menos científicas y tienden, a lo menos a desvirtuar las opiniones sensatas.

Víctor Marenco Boekhoudt
Ingeniero Geominero